Al pueblo peruano, protector del supremo poder delegado en las urnas. Con mucho pesar y un inmenso dolor, reportamos al pueblo del Perú la situación actual frente al congreso y el gobierno, unidos en una batalla que pretende destruir la democracia a fin de instaurar un régimen dictatorial, al mando de unos cuantos galifardos, que ya relamen como lobos hambrientos sus beneficios.
Con taimada paciencia, lograron armar un primer flanco, como escudo protector de cualquier reacción del sistema de justicia. Para ello reclutaron a jurisconsultos de medio pelo, de esos que pululan por ciertas universidades, con escaso entendimiento, sin principios, pero con ambiciones ilimitadas; y los convirtieron en magistrados del Tribunal Constitucional.
Para evitar sorpresas consiguieron un monaguillo que a las justas puede tocar una campana bautizándolo en pomposa ceremonia como Defensor del Pueblo. Una afrenta digna de mentes siniestras, el mandadero en cuestión, más que rabia provoca risas.
Con este apoyo lanzaron fuego graneado contra la Junta Nacional de Justicia, usando morteros, para atacar por la espalda, como acostumbran los filibusteros sin honra ni decencia. La defensa ha sido heroica, con el refuerzo de los lanceros del PJ han retrocedido. Se esperan nuevos ataques usando su TC, mientras siguen disparando contra el JNE.
Se reporta desde la retaguardia, ataques por aire y tierra, provocando impactos ambientales de peligro futuro, lograron un retroceso en el enfoque de género y con un populismo barato han puesto la economía en UCI, a pesar que el congreso, según la constitución, o lo que queda de ella, está impedido de aprobar leyes que generen gasto público.
Una sentencia del zalamero TC, en octubre del 2022, les abrió las puertas para el festín. En este ataque de infantería ya van más de 100 leyes promulgadas por insistencia. De la Sunedu solo quedan recuerdos. Los mazorqueros dejados al mando han destruido la institución, son tan desvergonzados que exigen al Estado celulares de alta gama para su uso personal entre otras gollerías.
La creación de nuevas universidades es un desmadre general, cada congresista quiere la suya, ya van 6 y otras 40 están en camino. Las bombas más mortíferas son la ley de amnistía que prescribe los delitos de lesa humanidad, en franca rebeldía frente a la Corte Interamericana.
La reforma de la ley de organizaciones criminales, exigiendo avisar al investigado y su abogado para realizar los allanamientos, ha causado gran alborozo entre las bandas de malandrines. Se prevé un crecimiento masivo de las extorsiones y ataques con explosivos a los negocios. La inseguridad nos ha convertido en rehenes en nuestras propias viviendas. Sus bombas de racimo arrojadas a mansalva, con el sello de terroristas, han causado temor en nuestras filas. Los defensores de los derechos humanos y aquellos que intentan oponer resistencia.
son atacados con balas Dum Dum, de esas que explotan y declaran caviar a todo lo que encuentran a su paso.
El descubrimiento de unos Chat entre el carnicero de la ex PCM y el hermanísimo presidencial, donde reclama por seguimientos ilegales e interceptaciones, nos anuncian el peligro al que estamos expuestos, si entre ellos usan métodos del fascismo ¿Cómo será con los opositores?
Se anuncian novedades en los próximos días, notificamos que, si la población no reacciona, dejarán al país en ruinas y reconstruirlo nos costarán años de esfuerzo, sudor y sacrificio de los más pobres.
